martes, 24 de abril de 2012

Leda y su visión lejana



Su amor parece  un cisne blanco que se aleja...
y se aleja, suave, dulcemente
por el cristal azul de la corriente,
como una vaga y misteriosa queja.

Me quedó su visión...
Era una tarde fría de lluvia intermitente;
bajo la máscara indolente
de su enigma.

Como un cisne blanco,
una  aparición
nostálgica y alada,
una ilusión de la fortuna.

Un cisne blanco y misterioso
que en la leyenda de un lugar brumoso,
surge  mi cuerpo
como la luna inmaculada.

Aun siento sus suaves golpeteos
nada sosegados
que disgregan poco a poco
las partículas de la piedra bravía.

Más mientras el silencio, la pena y la alegría
de lo ayer gozado, envuelven mi pecho desollado,
la dura piedra no mostrará su dulce ambrosía.


 Romina




Ilustración Juan Fran Matínez